Kindest Lines

¿Un sonido a lo The Cure en medio de una mezcla de melodías indie-pop y post-punk en la que destacan notas de sintetizadores y acordes de guitarra ‘in crescendo’? Esa es la descripción que los más entendidos intentaron hacer de la música producida por este prometedor trío norteamericano.

El primer tema que se escuchó de este grupo oriundo de New Orleans no podría ser incluido precisamente dentro del género dark-wave: “Baltimore” suena suficientemente interesante, pero es más una canción con visos electro-pop de esas que algún DJ poco experimentado se animaría a pinchar un sábado por la noche.

Desde luego que las influencias new-wave están más que presentes, pero a primera vista no había nada de especial o fuera de lo común que llamara la atención. Aún así, más de una revista musical no tardó en incluir a Kindest Lines en su lista de ‘grupos a seguir’…

Baltimore

Brittany Terry, Jack Champagne, y Justin Blaire Vial se encuentran a menos de un mes de lanzar su disco debut al mercado, Covered In Dust, el mismo que estará entre nosotros a partir del 15 de junio vía Wierd Records.

Las once canciones incluidas han sido producidas en Chicago por Alfredo Nogueira y Josh Eustis (de Telephone Tel Aviv), y hasta el momento tienen acordadas unas cuantas presentaciones -a nivel local- para empezar el respectivo trabajo de promoción…

Strange birds

Fueron dos primos mayores los que me presentaron a The Cure, The Smiths y a Depeche Mode… casi inmediatamente me di cuenta de que lo que ellos hacían era mucho más interesante de lo que se escucha en la actualidad.

Jack Champagne

Empecé a tocar la batería desde los 8 años y desde entonces no me detuve. Conocí a Jack en 5to grado y desde el inicio nos unió nuestro amor por Louisiana, el skate y el heavy metal.

Justin Blaire Vial

Siempre me ha gustado cantar y la mayoría de la gente con la que me relacionaba estaba metida dentro de la electrónica, así que ahora mismo me siento como pez en el agua.

Brittany Terry

No hace mucho que se ha estrenado el videoclip del segundo sencillo extraído del álbum: estamos hablando de “Destructive Paths to Live Happily“, un tema que termina por confirmar aquel ‘sonido a lo The Cure‘ que se mencionaba al inicio, y que evoca aquella atmósfera presente en el Desintegration de 1989.

Destructive Paths to Live Happily

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